lunes, 21 de febrero de 2011

4 días de cursos pre-matrimoniales, mucho mejor de lo que nos pensábamos

Al contrario de lo que podéis pensar todos, incluso nosotros antes de entrar por esa puertecilla casi invisible de la iglesia Santa Eulalia, los cursos pre-matrimoniales fueron geniales.

En pocas ocasiones, de las 9 horas y 45 minutos que duró el curso divididas en 4 días, nos incitaron a que fuésemos a Eucaristía –porque no se dice Misa, que significa irse, sino Eucaristía-, y que los jóvenes teníamos que rezar más, ayudar a los demás, etc…

El curso se basaba en escuchar a matrimonios que llevaban años casados, en un caso 57 años (…y 127 días, recordó la mujer), y en aprender de sus fallos y de sus aciertos como pareja. Una multitud de consejos y experiencias que nos enriquecían en cada minuto que pasaba de ese cursillo pre-matrimonial.

También al contrario de lo que pensamos la primera tarde de curso, teníamos mucho en común con las otras 28 parejas que estaban allí. Divididos en grupos de 7 u 8 futuros maridos y mujeres, aprendimos mucho los unos de los otros y nos los pasamos, al final, genial, mucho mejor de lo que nos pensábamos :D

El último día de cursillo nos despedimos haciendo un piscolabis con comida que trajimos entre todos, en el que el botellón corría a cargo de Don Antonio, el cura, un encanto que conoceréis el 6 de agosto, según dijo él mismo la noche anterior.

Después del refrigerio nos quedamos charlando algunas de las 8 parejas que formamos nuestro grupo hasta la 1 de la madrugada en la Plaza de Cort. En 4 horas nos pusimos al corriente de nuestras vidas y nos llegamos a conocer tanto como si fuésemos amigos desde hacía años. De momento, hemos decidido que nos iremos a ver en nuestras respectivas bodas. La primera, el 14 de mayo en La Seu. La última, el 8 de octubre en Sant Jaume. ¡Qué ganas!

Aquí tenéis el certificado que demuestra que esto va en serio:

No hay comentarios:

Publicar un comentario